Hoy hago 50 días en Wroclaw, Polonia.

Desde el primer día que pise este país, un 2 de Marzo, sabía que todo lo que iba a vivir en él iba a ser maravilloso. Hay mucha gente que tenía miedo, nervios… yo no, estaba súper segura que esta experiencia sería inolvidable.

Tengo la suerte de haber conocido a personas increíbles. Cada una de las personas que estoy conociendo me están aportando muchísimo, momentos únicos e inolvidables. Muchas de las amistades que he hecho estoy segura que no solo se quedaran en este viaje.

El trabajo que tengo me encanta. Mi compañera, el tutor y otro de los trabajadores son personas que hacen que tengas una mañana genial.

¿Algo de lo que me pueda quejar? Absolutamente no. Han sido 50 días perfectos. Me imaginaba que esta experiencia sería fantástica, pero lo está siendo muchísimo más. Nunca me hubiera imaginado todo esto. Mañanas de trabajo, tardes de cervezas y charlas y noches de fiestas. Los días se pasan volando.

Pero aunque cada día me guste más más Wroclaw, no nos quedamos quietos. Todos los fines de semana nos vamos a visitar otros lugares, como por ejemplo: Gory stolowe, Poznán, Jelenia Gora, Cracovia… Unos fines de semana inolvidables.

Siendo sincera claro que echo de menos a mi familia, amigos… y más aún esta Semana Santa, pero no quiero volver, aún no. Aún me queda mucho por ver y vivir aquí, me quedan 34 días llenos de momentos por recordar.

Porque esta experiencia no se va a volver a repetir, porque los que tenemos la suerte de que nos hayan dado esta beca tenemos que aprovecharla al máximo en todos los sentidos.

Cada vez queda menos para que esta aventura se termine.

Una experiencia que jamás olvidare. 

Yanire