martes, 2 de junio de 2015

En casita!

Egun on, aunque desde Hondarribia solo veo cielo gris :(

Estamos en casa tras un viaje de vuelta en el que por encima de todo nos hemos reído a hartar.

Todo empieza el sábado por la noche, cuando salimos de nuestra querida residencia rumbo al aeropuerto y pasando por Helsinki. Nos plantamos en el aeropuerto a la 1 de la madrugada y nos quedaban 6 horas de espera para que despegara el avión.

Algunos intrépidos decidieron dormir, pero el resto tuvimos una velada en la que no había conversación que fuera normal. Inquietudes de la vida, teoría de cuerdas...pero sin duda la más divertida, y por la que la gente que pasaba nos miraba como si estuviéramos locos fue cuando cierto individuo, que de la cara si quiere, nos preguntaba a los "informáticos curtidos en mil batallas" si era posible asesinar a alguien utilizando solo un ordenador. Tras muchas teorías, ideas de aplicaciones con tales fines y demás, la única conclusión decente fue que solo era posible si le tirabas el ordenador a alguien desde un segundo piso. Lo siento individuo.

Tras pasar los controles sin pitar por primera vez en mi vida, a las 7 despegamos y a las 8.30, horario ya español, aterrizamos en Amsterdam. Todo bien, nada fuera de lo común hasta que nos informaron de que nos cambiaban la puerta de embarque. Paseamos hasta la otra punta del aeropuerto y cuando quisimos entrar a la sala de espera, sorpresa! habían atrasado el vuelo. Tuvimos que esperar un buen rato, y otro buen rato dentro del avión, pero por fin sobre las 14.30 despegamos rumbo Madrid.

Una vez en Madrid, tuve que separarme de mis compañeros nada más salir del aeropuerto. Ellos iban directos a coger el tren de vuelta, a mi me quedaba una noche en Madrid y una entrevista de trabajo al día siguiente por la mañana.

Como ya dije en el post anterior, ha sido una experiencia inolvidable y que volvería a realizar si tuviera oportunidad sin dudarlo.

Un saludo a todos desde Hondarribia,

Artzai San José

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